Un pueblo con gran tradición hortofrutícola
Situada en pleno valle del Manubles tiene un clima que favorece la producción de los campos del lugar
Villalengua, anteriormente llamada Villaluenga, en el año 1140 fue encomendada a la Orden de San Juan de Jerusalén al igual que Cetina, Campillo de Aragón, Añón de Moncayo y Talamantes. Los historiadores mantienen que la Orden elegía lugares con buenos pastos para los bueyes.
El caserío del pueblo se levanta en una pequeña elevación en la margen izquierda del Río Manubles, mantiene un gran encanto entre sus calles. En la plaza mayor se encuentran varios de ellos como una fuente con cuatro caños, cada uno de ellos orientado hacia uno de los distintos puntos cardinales. También se encuentran en la plaza la conocida como Casa del Diezmo y junto a ella la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
Detalle de la portada
En el antiguo Hospital de San Ginés se encuentra actualmente el consultorio médico, en su fachada se encuentra una hornacina que guardaba una virgen de alabastro que actualmente se guarda en el interior del ayuntamiento.
Uno de los peirones del pueblo
Una de las cosas más llamativas del paseo por las calles del lugar es la gran cantidad de pilones que podemos ver, desde el Peirón de San José, que fue totalmente reconstruido de cemento y está situado en el centro de un bonito jardín hasta otros muchos de un estilo más clásico como los de La Purísima, construido en ladrillo y pintado de blanco, el de Santa Lucía o ya a las afueras en el camino hacia Torrijo de la Cañada el Peirón de San Leonardo.
En el centro la Plazuela del San José
También en plena vega del río se encuentra la ermita de San Juan, que tiene varias procesiones a lo largo del año. Ya un poco más lejos, al otro lado del río se encuentran las ruinas de la ermita de San Gregorio y la ermita de San Miguel. Cerca del casco urbano se conservan restos de una nevera, junto al camino que lleva al cementerio. Antiguamente había varias construcciones que aprovechaban la fuerza de las aguas del río como un molino harinero y un batán, y también en el término municipal se encontraban varias caleras.
Hay varios parajes naturales de interés en el termino municipal, como el Alto de la Hinojosa, las Cárvavas y la desembocadura del Río Carabantes en el Manubles.
La importancia de la agricultura se ve reflejada en el interés de los vecinos por preservar el medio natural
Calles del pueblo
Detalle de la fachada de una casa cerca de la plaza
Una interesante ruta por la comarca que incluye varios de los pueblos con entrada en el blog es la siguiente:
Incluye los valles del
Manubles y del
Ribota, se pueden ver múltiples edificaciones defensivas, religiosas y civiles al igual que variados paisajes y zonas naturales.
