Visita a la Colegiata de Santa María de Calatayud
Tras la conquista de Calatayud, la ciudad necesitaba un gran templo cristiano.
La torre es el principal punto de atracción, con una altura superior a los 70 metros es la más alta del mudéjar aragonés. De planta octogonal con contrafuertes en las aristas, tiene estructura alminar, con una torre interior y una exterior y las escaleras entre ellas. Es reseñable que cuenta con decoración en ladrillo desde la parte inferior, los dos primeros cuerpos son del siglo XIV, a partir del tercer cuerpo la decoración combina varios elementos geométricos, en el cuerpo de campanas se abren vanos con arco de medio punto, ya en el siglo XVII se realizo el último cuerpo y se colocó el chapitel coronándola.
También llama la atención el ábside, construido en dos fases, siendo el cuerpo inferior de la época de construcción del templo y el superior de la reconstrucción del siglo XVII.
Parte de la torre y el ábside
La portada renacentista es una de las remodelaciones que ha sufrido el templo a lo largo de los años, está realizada en alabastro de Fuentes de Jiloca, localidad próxima a Calatayud, está protegido por un soberbio voladizo de madera.
Iluminación nocturna
El claustro seguramente es la parte más antigua del templo, de grandes dimensiones, tiene el doble de largo que de ancho.
A principios del siglo XX la Colegiata estuvo varios años cerrada debido a una profunda reforma que concluyó en el año 2022 aunque desde unos años antes se podia visitar tanto el claustro como la torre.
